Rechazamos la agresión de Israel al pueblo del Libano.

Haciendo eco de lo ya dicho por nuestra compañera y Presidenta de Chile, Dra. Michelle Bachelet Jeria, rechazamos tajantemente la cobarde ofensiva militar emprendida por el gobierno ultra derechista de Israel, encabezado por su primer ministro Ehud Ólmert. Como ya sabemos Israel mantiene ocupados hace ya más de veinte años territorios del sur del Libano, en lo que se ha llamado “la franja de seguridad” del gobierno hebreo. Durante estos años han obligado a muchos palestinos y libaneses que habitaban dichos territorios a huir en busqueda de paz, sin embargo una resistencia compuesta por palestinos, sirios, libaneses e iranies principalmente ha intentado oponerse a la cobarde dominación israeli agrupandose bajo el nombre de Hezbollah (“partido de dios”), sin embargo y a diferencia de lo que la prensa a señalado, este grupo tiene un brazo civil y otro armado, este ultimo sin contacto alguno con el gobierno libanes y por tanto autonomo en sus decisiones. De esta forma y de acuerdo a lo señalado condenamos abiertamente que el gobierno de Israel emprenda acciones belicas en contra de la población civil libanesa por actos terroristas perpetrados por un minoritario grupo que no cuenta con apoyo ni material ni moral del gobierno libanes, a diferencia de israel que como bien sabemos recibe buena parte de su presupuesto militar directamente fondos provinientes de los Estados Unidos de Norteamerica. Por todo lo anterior y basados en los principios del derecho internacional reconocidos en diversos tratados suscritos por Chile, como por ejemplo la de autodeterminación de los pueblos, el rechazo a las agresiones ilegitimas, entre otros, no nos queda mas que condenar energicamente la política bélica emprendida por Israel y hacer un fuerte llamado de cese al fuego, a fin de que se reestablezca el estado de derecho en el Libano y se dignifique con ello a los millones de inocentes que sufren con la impotencia de ver destruidos sus sus sueños y esperanzas de un futuro de paz para las generaciones venideras.

Marco Mattar, js Valdivia.